La plantación de árboles, elementos fundamentales en la estructura y diseño de un jardín, es una labor que todo jardinero debe conocer. No es difícil, pero tiene sus reglas. Condiciona la vida de la planta y el conjunto.
Para plantar un árbol , especialmente si va a ser en el suelo, conviene escoger un día fresco y sin viento. La tierra donde se cavará el hoyo deberá estar húmeda, aunque no en exceso. Si está reseca, anegada o helada es mejor postergar la operación. Las malas hierbas deben eliminarse antes de cavar el hoyo.
• Distancia de plantación. En el caso de los árboles y arbustos, calcular y tener en cuenta el tamaño que alcanzarán de adultos es especialmente importante para determinar correctamente dónde se han de plantar en relación con otras plantas, la vivienda o la piscina.
• El tamaño del hoyo o la maceta. Los árboles y arbustos están destinados a alcanzar una cierta dimensión, de modo que el hoyo que se excave o la maceta que se elija deberán ser lo suficientemente amplios para que el cepellón quepa con holgura.
• Enmendar el terreno. Si la tierra del jardín no fuera de buena calidad, deberás enmendarla mezclándola con mantillo o estiércol bien descompuesto (no más de un 5%), o bien utilizar sustratos específicos para esa planta en particular: tierra de castaño o turba rubia para las acidófi las, sustratos levemente alcalinos para los frutales de hueso... Pide que te aconsejen en tu centro de jardinería.
• Trazar un alcorque. Alrededor del árbol o arbusto es conveniente excavar un alcorque, como es tradicional: contribuirá a un mayor aprovechamiento del agua de lluvia y riego.
Auditoría: Luis mercado